La Química Clínica es una rama de la microbiología que se ocupa del estudio de la funcionalidad de los órganos individualmente o en conjunto, para el diagnóstico, el seguimiento, el control de tratamiento, la prevención y la investigación de la enfermedad
Entre los perfiles que se ofrecen en el laboratorio tenemos:
Pruebas de función renal: creatinina y nitrógeno ureico
Pruebas de función hepática: Bilirrubinas totales y fraccionadas, proteínas totales y fraccionadas, transaminasas, ALP y GGT
Control de paciente diabético: Glucosa, Hemoglobina glicosilada, creatinina, nitrógeno ureico y microalbuminuria
Control de Lípidos: Colesterol total, LDL, HDL, Triglicéridos e índice aterogénico
Control de adultos: Colesterol total, LDL, HDL, Glucosa y ácido úrico
Perfil de infecciones: PCR
Control de electrolitos: Sodio, Potasio, Magnesio, Calcio, Fósforo y...